07 de Abril de 2023 - Por Raquel Ayala

Semana Santa

Esta semana Santa se nos presenta muy viva, pues estamos en un “mundo roto y bendecido”, con hechos concretos que nos mueve a reflexionar el por qué estamos viviendo nuevamente la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo, Nuestro Señor.
Deberíamos preguntarnos con el corazón y ojos abiertos frente a la realidad que hoy vivimos: guerras, violencia, asesinatos, maltrato físico y psicológico, ambiciones desmedidas de poder, etc. Comprendemos que Cristo nuevamente está sufriendo en los pobres, los débiles, los sufrientes de hambres y pobreza …. Él está siendo perseguido y maltratado por los enemigos de su Persona. Juzgado por los incrédulos de su Palabra, herido en tanta gente que sufre en el mundo de hoy, en el clamor de los inocentes.

Cristo vuelve a ser crucificado para librarnos de pecado social y ambicioso de algunos líderes políticos y de la maldad en algunos.

Quiero acompañar al Cristo crucificado y sentir el dolor de su sacrificio por nosotros, los seres humanos que Él tanto ama y perdona. Todo este panorama es desalentador, pero no podemos olvidar que Él ha vencido a la muerte.

Él dijo: “YO SOY LA RESURRECCIÓN Y LA VIDA”.  Ésta es nuestra fe y esperanza.  Nuestra misión, como cristianos y cristianas, es dar testimonio de los signos de resurrección de nuestro mundo. “Ser mujeres y hombres de esperanza” allí donde estemos, sembrar paz, unión, alegría, amor, en una palabra, ayudar a que vuelvan la alegría y la paz a este mundo, salvando la obra de la creación con nuestros valores cristianos.

Cristo está con nosotros y no prevalecerá la cizaña del Maligno. Vivamos la Pascua de Resurrección con la alegría de sentirnos partícipes del triunfo de Jesús sobre la muerte.

Raquel Ayala, RSCJ - Comunidad Santa María de la Encina