03 de Mayo de 2022

Tiempo de Pascua II

"Os anunciamos la Buena Nueva de que la Promesa hecha a los padres Dios la ha cumplido en nosotros, los hijos, al resucitar a Jesús” (Hch 13, 32-33)

En estos días de Pascua, en que celebramos la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, se cumple lo que Dios había prometido al pueblo judío. Jesús se muestra más humano que nunca, estableciendo relaciones directas con sus discípulos que demuestran su corporeidad. Les pide de comer (Lc 24,41-43), les pide que toquen su costado (Lc 24,39). Es Dios que quiere quedarse siempre como hombre, con su cuerpo resucitado, compartiendo con la humanidad, jugando todo el tiempo en su presencia… compartiendo mi alegría con los humanos (Pr 8, 30-31).

Si Cristo no hubiese resucitado, toda la predicación relatada en la sagrada escritura sería en vano, así como nuestra fe. Por ende, la resurrección de Cristo es un objeto de fe que nos ayuda a acercarnos al Padre y poder ser partes del Reino de Dios. También es una esperanza para nuestra resurrección futura "Cristo resucitó de entre los muertos como primicias de los que durmieron [...] del mismo modo que en Adán mueren todos, así también todos revivirán en Cristo" (1 Co 15, 20-22)

Katerina Parra, ex alumna Colegio SC Concepción